Autoridades y habitantes de la ciudad alpina de Hall, ubicada en la región del Tirol austríaco, reaccionaron con indignación y desconcierto al descubrimiento de una fosa común con 220 víctimas del régimen fascista.
La fosa fue hallada durante unas obras para la ampliación del hospital regional del Tirol, informó en Canal de televisión austríaco ORF.
Según representantes del hospital e historiadores, los 220 restos humanos podrían ser victimas del programa de eutanasia de los nazis, pues se trata de pacientes con discapacidades físicas o mentales.
Hasta ahora las autoridades austriacas afirmaron que no tenían conocimiento sobre ejecuciones en la región bajo el régimes nazi en Austria ente 1938 y 1945.
Pero, corforme al historiador Horst Screibesr, hubo supocisiones sobre un programa de eutanasia en las instalaciones del viejo hospital regional.
Evidentemente, los responsables dejaron morir de hambre a los pacientes, comentó Schreiber.
Según el experto, el gobierno regional trató de ocultar el genocidio en los años sesenta, después de la derrota del régimen fascista.
El gobierno regional borró en 1963 premeditadamente todas las informaciones relacionados con los hechos en el salón de los archivos, dijo Schreiber en entrevistas de prensa.
Otros casos:
Hasta ahora se supo de los asesinatos de 30 milpersonas enfermos o con
discapacidades en el castillo de Hartheim, cerca de la ciudad de Linz,
en el noreste de Austria.
Historiadores estiman que en total alrededor de 200 mil personas fueron asesinadas en el contexto del programa de eutanasia durante la dictadura nazi.
El gobernador regional del Tirol, Guenther Platter, se mostró consternado por el descubrimiento.
El estado de Tirol reconoce plenamente su responsabilidad histórica, dijo el funcionario.
Platter anunció la creación de una comisión de expertos para investigar el caso.